El calor de las piedras penetra en los músculos y las articulaciones y otorga una mejor movilidad, lo que ayuda a deshacer contracturas viejas que de otro modo resultarían dolorosas.
Además, estimula la circulación sanguínea, relaja el cuerpo y consigue un efecto sedante muy placentero.
Mi consulta está en Jerez, si quieres venir, aquí puedes ver las tarifas y otra información práctica.
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